Wenger y una divertida anécdota: La revolución del chocolate

Wenger llegó a Arsenal siendo muy poco conocido y generando mucha desconfianza, incluso en sus propios jugadores. Trajo consigo muchos trucos bajo el brazo que dejaron sorprendidos a sus pupilos.

Uno de los principales cambios fue la alimentación, generó toda una revolución (En toda la liga incluso) incluyendo nutricionistas y una dieta con muchas prohibiciones haciendo énfasis en la cerveza y...el chocolate.

"Cuando llegué cambié algunos hábitos de los jugadores, lo cual no es fácil en un equipo donde la edad promedio es de 30 años." dijo Wenger.

Abro paréntesis antes de seguir para presentarte a la barra energética de chocolate "Mars". Protagonista principal de esta historia.

Era muy común que a los jugadores, en ese tiempo, les dieran barras de chocolate en el medio tiempo para recuperar energías durante el descanso. Arsenal no era la excepción y religiosamente les daban a todos sus jugadores una deliciosa barra de chocolate "Mars". Cierro paréntesis.

Arsene Wenger prohibió de arranque el consumo de cualquier tipo de chocolate dentro y fuera del campo de juego, en especial el consumo de "Mars" al medio tiempo.

Cuando a Wenger le preguntaron por esto, años después, contó la siguiente anécdota que sucedió en su primer partido oficial como entrenador gunner frente al Blackburn:

"Al medio tiempo del partido le pregunté a mi fisio Gary Lewin: 'Nadie está hablando, ¿Qué les pasa?' Él respondió: 'Tienen hambre'. No les había dado su chocolate antes del juego. Fue muy divertido", dijo Wenger entre risas.

Pero esto no acabó ahí. En el autobús de vuelta a casa, después de la victoria por 2-0 contra el Blackburn, los jugadores realizaron lo que después se conocería como "La Revolución de los chocolates Mars"

"Todos los jugadores estaban cantando en el bus: '¡Queremos nuestras barras 'Mars'!", recodaba Wenger nuevamente entre risas.

Lamentablemente para los jugadores (Y para la marca "Mars") su revolución no se concretó. Y en el campo de juego, mientras el chocolate seguía prohibido, las victorias seguían llegando.

Espero de verdad que les haya gustado esta historia. A mi ya me dio hambre, me voy a comprar a un chocolate...Hasta la próxima.



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