Todos se han quedado encantados con Freddie desde que llegó a Arsenal para ocuparse de los juveniles. Y es que desborda personalidad. Es relajado, despreocupado y espontáneo pero también es increíblemente terco y ambicioso. Alguna vez dijo: "No soy particularmente disciplinado, pero soy terco como pocos."
Este domingo el ex-jugador de 42 años cumplirá el sueño de dirigir al club que ama. Es una oportunidad única y a todos les queda claro que hará todo lo posible para tener éxito. En una entrevista dijo: “De niño podía acostarme en la cama y no hacer absolutamente nada durante horas, pero una vez que decidía hacer algo, grande o pequeño, no podía parar hasta que se hubiera completado. Esa es mi fuerza impulsora, para bien o para mal."
El camino de Ljungberg no ha sido sencillo. Luego de dejar el club en 2007, jugó para West Ham, Seattle Sounders, Chicago Fire, Celtic, Shimizu S-Pulse y Mumbai City antes de retirarse en 2014. Al principio no tenía ganas de dirigir, pero luego descubrió que eso era exactamente lo que quería hacer. En 2015, Ljungberg le preguntó a Andries Jonker, el entonces gerente de la academia del Arsenal, si podía unirse al cuerpo técnico y comenzó con el equipo sub-16 del club.
A medida que más entrenaba, más se inspiraba y sus instintos competitivos adormecidos comenzaban a despertar rápidamente. En 2017, regresó al Arsenal (Tuvo un breve paso como asistente en Wolfsburgo) para hacerse cargo de la sub-23. Un año después, el pasado junio, fue ascendido a asistente del primer equipo.
Pero ojo! Ljungberg no estaba ciego, sabía a qué dirección soplaba el viento en las últimas semanas. Se ha estado preparando para hacerse cargo, asegurándose de estar listo por si tuviera que intervenir y, en serio créanme, hará todo lo posible para conseguir el trabajo de forma permanente.
Las personas cercanas a él lo describen como una "esponja", un aprendiz rápido ansioso por escuchar consejos. Disfrutó de su breve período trabajando para Emery, sintió que el español era un buen entrenador y admiraba sus ejercicios de entrenamiento.
Su trabajo dio frutos rápidamente. Los resultados del Arsenal mejoraron y los jóvenes que han trabajado con Ljungberg, como Joe Willock y Bukayo Saka, hablan con entusiasmo de su entrenador. Seguro que Ljungberg querrá que sus jóvenes pupilos participen en esta nueva etapa pero claro, sin exagerar. Sabe que necesita atraer a sus jugadores experimentados y mantener a sus estrellas.
Ljungberg fue parte de la época de oro de Arsenal y es seguro que querrá que su club vuelva a conectar con lo mejor del Wengerball. No es pragmático como Emery y se construyó una excelente reputación como entrenador de la sub-23 la temporada pasada al apegarse a sus ideales: Insistencia en el fútbol rápido y ofensivo.
Como entrenador, Ljungberg ha sido comparado con ese maestro de escuela que es firme y exige respeto, pero que también le gusta a sus alumnos. Parece haber alcanzado el equilibrio perfecto de poder poner a los jugadores en su lugar y decirles cuándo necesitan elevar su juego, pero también comprende el elemento humano.
Saka dijo esto sobre él hace poco: "Ha estado conmigo desde que tenía 15 años y me ha visto hacer cosas increíbles, pero siempre me dice que me mantenga humilde y siga trabajando duro porque realmente piensa que puedo ser un jugador superior.
Él ha sido un jugador antes, así que entiende cómo me sentiría. Ha jugado en mi posición y es muy bueno tenerlo allí, una leyenda del Arsenal que me da consejos. No hay mucho más que pueda pedir."
Él ha sido un jugador antes, así que entiende cómo me sentiría. Ha jugado en mi posición y es muy bueno tenerlo allí, una leyenda del Arsenal que me da consejos. No hay mucho más que pueda pedir."
Nadie sabe lo que irá a pasar en las siguientes semanas pero de algo estoy completamente seguro: Lo dará todo, como siempre.
Fuentes: Artículos de Marcus Christenson y James Benge
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